Honduras ha registrado, en los primeros dos meses de 2025, al menos siete muertes a causa de la mucormicosis (hongo negro), incluida una niña de entre tres y cuatro años, según informó este lunes una fuente oficial.
«Hemos tenido siete casos de mucormicosis en lo que va del año: seis adultos y una paciente pediátrica, todos fallecidos», indicó Sandra Montoya, jefa del área de micología del Hospital Escuela de Tegucigalpa, en el noticiero Hoy Mismo de TSi.
Montoya explicó que uno de los fallecidos por hongo negro era paciente oncológico, mientras que los demás sufrían de enfermedades preexistentes, como hipertensión y diabetes, las cuales no tenían un control adecuado.
«Los pacientes llegan al hospital con cetoacidosis diabética, lo que facilita que, al estar en contacto con esporas (de hongos presentes en el ambiente), adquieran y desarrollen rápidamente la enfermedad», afirmó la doctora.
La cetoacidosis es una complicación grave de la diabetes en la que el cuerpo produce un exceso de azúcar en la sangre y disminuye los niveles de insulina. Esta condición puede ser fatal si no se maneja adecuadamente.
Procedencia de las víctimas
La mayoría de los pacientes que murieron por mucormicosis provenían de la zona sur y oriente del país. Solo uno era de Tegucigalpa, detalló Montoya.
La doctora también destacó que en Honduras ninguno de los casos de hongo negro se ha relacionado con el covid-19, como ocurrió durante la pandemia. «Este problema ha afectado a pacientes con inmunocompromisos», explicó.
Por esta razón, Montoya instó a los hondureños con enfermedades preexistentes a seguir sus tratamientos médicos a tiempo, llevar una dieta balanceada y realizar ejercicio físico.
¿Qué es la mucormicosis?
La mucormicosis es provocada por el hongo Mucor, conocido comúnmente como hongo negro. Esta infección afecta principalmente la nariz, los ojos y, en algunos casos, los labios.
El hongo crece en alimentos en descomposición, como carnes, pan o verduras, y puede contraerse al ingerir estos productos. Además, puede transmitirse por contacto directo con la piel a través de una herida abierta o al ser inhalado.
Las personas más propensas a contraer mucormicosis son los diabéticos, pacientes con cáncer, VIH/sida, leucemia y aquellos tratados con altas dosis de esteroides tras haber sufrido covid-19.